Declan Rice (Kingston upon Thames, 1999) aterrizó en el Emirates bajo la sombra de la sospecha.Los 116 millones de euros que pagó el Arsenal al West Ham para vencer la competencia del City alimentaban las dudas.
«Cuando se concretó el traspaso estaba muy nervioso por el precio. Eres un ser humano por el que acaban de pagar 116 millones y eso no me parece muy normal. Entonces me dije: sé tú mismo. Y eso es lo que intento hacer: jugar lo mejor posible. No pienso en lo que costé y no dejo que me afecte de ninguna forma», admitía allá por noviembre.
No pienso en lo que costé y no dejo que me afecte de ninguna forma
El internacional inglés, de 25 años, abandonó el West Ham con una asignatura pendiente a ojos de sus grandes críticos: su falta de gol. «No marca suficientes goles ni da suficientes asistencias. Soy un gran fan suyo, pero quiero un poquito más de él. Si va a costar mucho dinero y competir por trofeos, necesita dar mucho más, así de simple», aseguraba Roy Keane el pasado curso.
Soy un gran fan suyo, pero no marca suficientes goles ni da suficientes asistencias
Su llegada al Emirates ha coincidido con la mejor temporada de su carrera a nivel anotador: Rice suma siete goles -todos en Premier- y 10 asistencias. De ahí que no haya dudado en replicar a sus ‘haters’: «La gente que habla de mi capacidad realizadora, Keane, Souness o Redknapp, no es que marcaran cientos de goles a lo largo de su carrera… Sin embargo, son muy recordados por su papel como centrocampistas. Por tanto, no se trata sólo de marcar goles. Ése nunca ha sido mi papel principal».
Lo cierto es que Rice le ha cogido el gusto a marcar: a su disparo de media-larga distancia y su ‘don’ en las jugadas de estrategia le ha sumado su capacidad para incorporarse desde segunda línea, como demostró en el tercer gol en la victoria sobre el Bournemouth (3-0).
«En mi última etapa en el West Ham -marcó 15 goles y repartió 13 asistencias en 245 partidos- comencé a marcar y me empecé a marcar objetivos en este sentido», reconoce.
En mi última etapa en el West Ham empecé a marcar y me empecé a marcar objetivos en este sentido
La vuelta al once de Thomas Partey, ya recuperado de su lesión de larga duración, le ha ayudado a ‘liberarse’. «Es un jugador enorme. Tenerle ahí me permite avanzar más», apuntaba tras marcar y asistir contra el Bournemouth. «Lo conseguimos a mitad de precio», cantaban con sorna los fans ‘gunners’.
Mikel Arteta, lógicamente, es el primero en ensalzar la evolución anotadora de Rice: «Pensábamos que los números que está logrando iban a estar muy relacionados con los espacios que ocupa… pero lograrlo, más en esta Liga, es otra cosa. Es más, lo ha conseguido incluso ocupando distintas posiciones y eso no es fácil».
No son sólo los espacios que ocupa, también es el vacío que deja. Mientras el Arsenal le adora, el West Ham le extraña. «¿La diferencia a nivel defensivo con la temporada pasada? Declan Rice. Teníamos al mejor mediocampista del país protegiendo la parte de atrás», señala David Moyes. Palabras mayores. Declan Rice es ‘arroz bomba’ para los ‘cañones’ del Arsenal.
