La Championship ha llegado a su fin con muchas sorpresas: el ascenso del Ipswich Town, el descenso del Birmingham City ola permanencia del QPR de Martí Cifuentes tras una remontada espectacular. Lo que también sorprende en este final tan indescriptible de la categoría de plata del fútbol inglés es su tabla de goleadores.
Dos de sus tres máximos artilleros han sido de equipos que, hasta en la jornada 46, no han visto certificada su permanencia, como son Blackburn Rovers y Plymouth Argyle. Sus protagonistas, Sammie Szmodics y Morgan Whittaker. El irlandés y el de Derby, con 27 y 19 goles respectivamente, no han pasado de puntillas por dos equipos que, pese a afrontar el curso con objetivos diferentes, se han visto en la tesitura de batallar hasta la última jornada por quedarse en Championship.
Szmodics, el Ben Brereton 2.0
En Blackburn saben de qué va la cosa cuando se habla de goleadores, tanto en el pasado con Alan Shearer como en el presente más reciente con Ben Brereton. El anglo-chileno no logró el ascenso con los ‘rovers’, pero sus 47 goles y 16 asistencias en 177 partidos dejaron huella en Ewood Park.
El irlandés de origen húngaro, canterano del Colchester United, se forjó entre League One y League Two con el equipo del este de Inglaterra, cogió el testigo de Ivan Toney en Peterborough con 27 goles en 96 apariciones y, después de tener cada vez menos presencia en ‘The Posh’, fue dirección Blackburn. En su segundo año en los ‘rovers’, su impacto ha superado los registros globales de los de John Eustace.
La dinámica del equipo en una temporada complicada no ha sido impedimento para un Szmodics que se ha encaramado al liderato de máximos goleadores de Championship, con 27 dianas en 44 partidos. Desde la jornada 15 hasta la 19, el irlandés vio puerta de forma consecutiva en todos los partidos, haciendo doblete al Norwich y a un rival directo como lo acabó siendo el Birmingham.
Más allá de sus cifras anotadoras, Szmodics también se ha caracterizado por ser un futbolista asociativo, al que le gusta salir del área para ser partícipe del juego con su continuidad del juego hacia adelante y sus movimientos de apoyo y desmarque. El Blackburn Rovers acabó 19º tres puntos por encima de los puestos de descenso, opuesto al nivel de un Szmodics al que la Premier League, si no lo ha hecho ya, llamará a su puerta.
El ascenso meteórico de Whittaker
Morgan Whittaker volvió a Championship… y puso su huella. El mediapunta inglés, después de debutar en el Derby County y pasar sin pena ni gloria por el Swansea City, bajó un escalón en su carrera para volver a ‘ascender’. Un curso en el Lincoln City donde ya se enseñó y otra en el Plymouth Argyle, en la que se confirmó como el líder del regreso de los ‘pilgrims’ 14 años después con nueve goles en 25 partidos, fueron suficientes para que su talento se destapase.
En su vuelta, el objetivo del Plymouth estaba en permanecer de categoría, pero Whittaker performó por encima de lo que se presuponía a inicios de campaña y su figura fue letal. Sus 23 años solo fueron un número, y el de Derby cogió la batuta para salvar a los de Ian Foster de la quema.
Sumó 19 goles y ocho asistencias en 45 titularidades en Championship, solo superado en tantos por Adam Armstrong, delantero del Southampton con 21, y el propio Sammie Szmodics, atacante del Blackburn con 27. Unas cifras sorprendentes para un futbolista que, siendo extremo derecho de base, se ha movido mucho por la mediapunta con la intención de tocar más balón y ser más clave.
Es increíble. ‘Usé’ el interés de la Lazio para seguir jugando con confianza y no descentrarme
Su progresión fue tal que clubes de la Premier, e incluso la Lazio en Italia, mostraron interés por el delantero inglés en el mercado invernal, pero Whittaker aprovechó ese interés para mejorar en su juego y, como cúlmen, se mantuvo como capitán del barco e hizo a los ‘pilgrims’ continuar en la categoría.
La temporada 1999/00, la similitud en LaLiga
La tabla de goleadores en Championship fue sorprendente por los equipos en los que militaban y sus posiciones finales en la tabla, pero hay precedentes… y uno fue en el fútbol español. La temporada 1999/00 de LaLiga, que ganó el Deportivo por delante de Barça y Valencia, tuvo de máximo goleador a Salva Ballesta.
El delantero zaragozano, después de pasar por las categorías inferiores del Sevilla y debutar en el primer equipo hispalense, firmó por el Racing en 1998 y, en su segundo año en el conjunto cántabro, voló. 27 goles le hicieron ‘pichichi’, algo que sirvió para que los de Gustavo Benítez salvasen la categoría por cuatro puntos.
El que también marcó muchos goles, 24, fue Jimmy Floyd Hasselbaink. El neerlandés de origen surinamés fichó por el Atlético de Madrid para resurgir al equipo después de un 13º puesto la campaña anterior. Llegó de ser pichichi con el Leeds United… y casi lo es en su primer año en España. Marcó 24 dianas, solo superado por Catanha, del Málaga, y por el propio Salva Ballesta. No evitó que los rojiblancos perdiesen la categoría junto a Real Betis y Sevilla.
